En su viaje, Innocent entra en contacto con una miríada de personajes cómicos con el rey, Trickster, el carterista y el detestable turista con su malvado perro.

Entre la fuerza y la fragilidad, la risa y la carcajada, la confusión y el equilibrio, KOOZA explora temas de temor, identidad, reconocimiento y poder. El espectáculo se desarrolla en un universo visual apasionante y exótico lleno de sorpresas, emociones, escalofríos, audacia y participación total.

Un gran espectáculo visual como era de esperar del Circo del Sol y aunque no cumple con la espectacularidad a que nos tenían acostumbrados en ediciones anteriores, no deja de ser un espectáculo entretenido y lleno de color y ritmo.

Tal vez por que ya nos hemos acostumbrado a ver espectáculos similares, con estéticas parecidas o por el alto nivel de algunos espectáculos que ha ofrecido el Circo Price en los últimos tiempos, (para los seguidores del circo Price y este tipo de espectáculos será evidente la similitud entre los números e incluso sobre la temática de esta nueva propuesta del circo del Sol) no resulta tan espectacular como se esperaba..

Eso si, los números de contorsionismo, acrobacias, alambre, etc., todos ellos, aun siendo conocidos, van un paso más lejos de lo ya visto y conocido, lo que hace que el público salga con una buena sensación y apreciando la estupenda labor de los componentes de este espectáculo.

Equilibrismo sobre sillas, Charivari, Contorsionismo, Mano a mano, Alambre alto, Manipulación de aros, Trapecio solo, Báscula, Dúo de monociclo y Rueda de la muerte son los números que se van sucediendo mientras que el personaje de Innocent va descubriendo a través de un viaje lleno de diferentes personajes, su lugar en el mundo.

Un espectáculo con música en directo, con mucho ritmo, color, un sensacional vestuario muy trabajado y buenos números, que nos devuelve al circo más físico, que aunque menos espectacular que en ocasiones anteriores, consigue su objetivo, entretener y sorprender.