Risas a carcajadas en esta comedia dirigida por Paco Mir e interpretada por dos grandes actores cómicos, Ricard Borràs y Pep Ferrer. La banqueta nos cuenta una historia divertida, refinada. inteligente e inteligible. Desde el 12 de noviembre de 2013 en el Teatro Galileo de Madrid.

Todos juntos le sacan el máximo partido a un texto fino y sutil que, entre notas musicales, risas y una pizca de poesía, induce a una reflexión sobre la amistad y el arte, sobre cómo son de vanas las relaciones humanas y sobre el esnobismo que, a veces, acompaña en demasía a los temperamentos más creativos.

Descripción: A dos reconocidísimos concertistas de piano a cuatro manos para poder preparar concienzudamente su próxima comparecencia ante el exigente público nipón, su agente los ha enviado a ensayar a un pueblecito idílico de los Alpes italianos llamado Schlern. Seguro que nada puede ir mal en un entorno tan tranquilo, con un paisaje tan relajante de fondo y con tanto aire puro...

Pero Pablo y Vladimir hace ya mucho tiempo que se conocen, quizá de masiado; han pasado muchas horas compartiendo piano codo con codo y, en especial, una banqueta que, ahora, parece que a cada momento se hace más y más pequeña. Y es que esta superficie donde reposa la anatomía de los dos protagonistas será el escenario de unos “estira y afloja” llenos de humor, un humor tan inteligente como inteligible al que dan vida dos grandes actores de comedia, Ricard Borràs y Pep Ferrer, dirigidos por Paco Mir que no es menos experto que ellos en el arte del humor.

Comentario:

La banqueta, una obra escrita por Gérald Sibleyras, traducida por Ricard Borràs, dirigida y adaptada por Paco Mir e interpretada por Ricard Borràs y Pep Ferrer que nos habla de la amistad, de las relaciones humanas, del deterioro de las mismas cuando las cosas se guardan en el interior, y de cómo las relaciones se enquistan y las cosas que nos unen se hacen cada vez más pequeñas.

Una comedia de humor inteligente que se basa en la fuerza del texto, bien construido, irónico y sagaz que huye del chiste fácil para ahondar en el alma del ser humano. Tanto la traducción de la obra original como la adaptación están bien conseguidas y Paco Mir ha sabido introducir toques de humor de su propia cosecha que no deterioran el concepto original, al contrario, lo acercan más al espectador.

Las relaciones entre dos pianistas que forman un dúo artístico, que tocan el piano a cuatro manos, y cuyo existo o fracaso va unido y en dependencia, genera envidias y conflictos guardados desde hace tiempo, saliendo a la luz inexorablemente en un momento de calma y soledad de ambos miembros del equipo. Ambos personajes entran en crisis, tanto en la faceta creativa como personal.

Inseguridades, ansias de grandeza, perfeccionismo, psicosis, envidias, todo sale a luz de la mano de Ricard Borràs y Pep Ferrer que representan de forma excelente, a estos dos músicos de personalidades dispares, tan reales y creíbles como las propias relaciones humanas. El mundo de los artistas es el punto de partida para esta historia que se puede trasladar a cualquier situación y sector. Eso sí, al final la sangre no llega al río y todo se arregla muy fácilmente.

Una obra llena de humor e ironía, con un texto bien tratado e interpretado que merece la pena no perderse.