valoración: 5

El escritor/director Craig Brewer dirige un “remake” del clásico de 1984, "Footloose". Ren MacCormack (interpretado por el debutante Kenny Wormald) se traslada de Boston a la pequeña ciudad sureña de Bomont donde experimenta un fuerte choque cultural. Unos años antes, la comunidad se vio sacudida por un trágico accidente en el que murieron cinco adolescentes después de una noche de fiesta. En consecuencia, las autoridades locales y el Reverendo Shaw Moore (Dennis Quaid), aprobaron unas leyes para prohibir la música a todo volumen y el baile en la ciudad. Haciendo caso omiso a las normas, Ren se enfrenta a la prohibición, revitalizando la ciudad y enamorándose de Ariel, la rebelde hija del reverendo (Julianne Hough).

Enésima revisión del rebelde inadaptado que se convierte en el "chico nuevo". En esta ocasión el nexo de unión de la película es el baile, sin ser un musical (aunque referencias a Grease no faltan) y sin números gratuitos. Por otro lado, tópicos a discreción:

• Hija del predicador de un pequeño y retrógrado pueblo de la América profunda intenta desesperadamente llamar la atención mostrando sonrisa, escote y piernas (y no necesariamente en ese orden)
• Chico nuevo se junta con los menos populares y tiene algún encontronazo con el chico duro del pueblo que es, obviamente, el novio de la hija del predicador
• Chico conoce chica, chico baila, chica enseña, chico baila, chica enseña...
• Doble moral, sermones dominicales, carreras de coches, baile, moralina...
• Pequeño bajón antes del apoteosis final
• Fundido en negro

Y pese a todo, no se ve mal, la verdad.

Obviamente, la sucesión de tópicos usamericanos no ayuda mucho a involucrarse en una trama que, por lo demás, no tiene demasiadas pretensiones. Pero al menos no caen demasiado en la ñoñería y los números musicales son bastante entretenidos y con un aire casual que hace que no estén fuera de lugar.

La banda sonora es muy animada y muy sonora, lo que también ayuda a que no se haga pesada en ningún momento.

Probablemente a los alumnos de secundaria les resulte entretenida, aunque un poco ñoña.