información:

(EN ROJO INFORMACIÓN FACILITADA POR LA COMPAÑÍA / TEATRO):

Mía no es la obra teatral que seguramente cabría esperar acerca de una víctima de violencia de género; es una obra sobre la liberación, sobre los sentimientos de Elvira, que se debate entre la felicidad de una puerta que se abre y la tristeza de otra que se cierra.

En la angustiosa noche en la que nuestra protagonista espera que la llamen del hospital donde está ingresado quien ha sido su pareja durante varios años, y que la ha sometido a malos tratos físicos y psicológicos, Elvira decide grabar en vídeo, un testimonio de sus recuerdos, sus sentimientos, sus agravios. Esto la ayudará a exorcizar sus demonios internos al expresar en voz alta su dolor, su miedo, sus dudas, su soledad y, sobre todo, su vergüenza por haber soportado malos tratos en silencio.

comentario:

MÍA de Miguel Valiente, es una propuesta que habla sobre la violencia machista a partir de las reflexiones de una mujer maltratada, unas reflexiones que tienen lugar durante una noche de vigilia. El intenso texto escrito por Miguel Valiente es llevado a escena por la compañía Doce Canciones, bajo la dirección de Imán Velasco. Miguel Valiente nos presenta en MÍA, una propuesta unipersonal, bien construida y estructurada, que aunque se desarrolla en forma de monólogo, da voz no solamente al personaje de Elvira, también a otros personajes (a través de voces en off), que ayudan a construir una imagen de la vida de la protagonista. Así escucharemos a su madre, al maltratador, policías, amiga, etc., en una propuesta que intenta, a través de la angustia, el miedo y la desesperación del personaje de Elvira y sus experiencias, conseguir que el espectador comprenda el drama de quien sufre en este tipo de situaciones.

Doce Canciones, compañía nacida a partir de un taller de teatro, de la que Miguel Valiente también forma parte, nos presenta su tercer montaje MÍA, donde Elvira, una mujer que sufre, deja que oigamos su voz dejando claro que dispone de la fuerza necesaria para no perder la esperanza. (Revisión del texto: Lena Álvarez).

Y lo hace sirviéndose de una actriz Laura Mayo, que es capaz de mantener la atención del espectad@r durante toda la propuesta, gracias a su intensidad dramática y su dominio de la escena, dejando claro que su fuerza en escena es parte fundamental para que la propuesta funcione. Esta joven actriz es capaz de llevar todo el peso de la propuesta sobre sus hombres, atrapando al personaje de Elvira y haciéndolo suyo sin problemas.

Laura Mayo pone toda la carne en el asador en una propuesta intensa y dura que comienza de forma algo confusa y precipitada, con unos movimientos, acciones y sonidos que no cuadran demasiado con lo que el personaje nos va a contar, aunque es cierto que buscan iniciar la propuesta con un alto punto de tensión y cierta intriga. Es cuando Elvira se ‘relaja’ y comienza a contarnos su historia, es cuando la propuesta alcanza su verdadera dimensión. Al igual que en el comienzo, el final de la propuesta, se alarga intencionadamente para que Elvira realice reflexiones y preguntas que pueden parecer innecesarias por obvias, pero que intentan poner el foco en la esperanza de un futuro mejor.

El texto tiende a la sobre dramatización, especialmente en algunos momentos (construcción de los personajes, el embarazo, etc.), una dramatización que si bien, sirve para aumentar el efecto de empatía hacia el personaje protagonista, aparta al espectador del mensaje sobre el efecto físico, emocional y psicológico del maltrato que quiere transmitir la propuesta, llevando lo general a tan particular que pierde credibilidad (y no pongo en duda la credibilidad del relato, ocurre eso y mucho más, pero mi cometido es realizar un análisis teatral de la propuesta, y el paso de lo real a lo literario y a lo teatral necesita coherencia, estructura y un espacio adecuado). Es interesante señalar la forma en que se realiza la construcción de los personajes, ya sabemos que, el maltrato se produce en cualquier nivel social, educativo, económico, etc., y en cualquier circunstancia, por ello, llama la atención que, en esta propuesta, todos los personajes que rodean a la protagonista tengan una definición bastante oscura (pareja, padre, madre, policías, medico, etc.), incluso en el caso de la ‘amiga’ se muestra un personaje ausente y en la distancia, efecto que hace incidir toda la ‘luz’ sobre la protagonista. En ese sentido, y partiendo de que todo lo que se cuenta es interesante, podemos encontrar algunos datos que parecen no aportar tanto valor a las escenas, por ejemplo, el momento en que comienza la relación (un amor apasionado que surge de un ‘calentón’), el uso excesivo de estereotipos (sobre todo de los personajes masculinos de en esta historia), tópicos (chocolate, etc.), etc., que si bien, sirven como estrategia para dar más fuerza e impacto sobre el personajes de Elvira, y remarcar su estado de soledad, también parecen producir el doble efecto de empatía – distancia antes mencionado.

La escenografía creada por Elliot Kane es sencilla, pero efectiva, remarcando la idea de encierro, falta de libertad de la protagonista, separación, etc., está construida con pocos elementos, pero bien estudiados que se complementan con la música, el diseño de sonido de Dustin Calderón y la cuidada iluminación de Jose Carlos González. Además, la historia utiliza como recurso las voces en off, un efecto no siempre efectivo ya que, en ocasiones, suenan poco naturales y existen algunos desajustes en los diálogos (con respecto a los tiempos en la interacción protagonista – voces), algo que seguro se subsanará con el propio rodaje de la propuesta.

Pero estas circunstancias, no le quitan valor a la propuesta, que se muestra interesante y necesaria, siendo una obra bien escrita y estructurada, que se centra en dar visibilidad al drama que sufre una mujer que convive con su maltratador.  Además, la propuesta se mueve por muchos terrenos (algunos muy de pasada, pero que se tienen en cuenta), y remarca circunstancias como la pérdida de la autoestima, la búsqueda de modelos o patrones conocidos, la repetición de roles, el miedo, la incapacidad para amar de forma sana, etc. pasando a través de la violencia psicológica, ambiental, económica, sexual, física, etc. en un proceso narrativo con preguntas y respuestas interesantes, aclaratorias y bien documentadas.

 

ficha:

Dramaturgia: Miguel Valiente

Dirección: Imán Velasco

Intérprete: Laura Mayo

Música y diseño sonoro: Dustin Calderón

Idea original, iluminación y visuales: Jose Carlos González

Escenografía: Elliot Kane

 

VOCES EN OFF

Madre: Lourdes Guerras

Padre/Borracho: Paco Vicente

Susana: Tere Vilas

Él: Kino Gil Ribera

Policía 1: Vicente Ramos

Policía 2: Juan Rueda

 

FICHA TÉCNICA

Dirección técnica: Jose Carlos González

Ayte. técnico: Mara Lope

Revisión del texto: Lena Álvarez

Producción: DoceCanciones